La tecnología móvil progresa en el tejido empresarial pese a algunos frenos

Una de cuatro pymes cuenta con tecnologías de movilidad, según un informe de Fundetec, y un 80% emplea el móvil con fines profesionales. Este tipo de herramientas goza de buena penetración entre las grandes organizaciones pero no es así en la microempresa. Entre los principales inconvenientes para su avance: el coste, la complejidad de uso y el desconocimiento.

Con una valoración del uso de las tecnologías de movilidad de 3,7 sobre 5, un 25% de las 2.200 empresas consultadas para realizar el “Diagnóstico de movilidad en la pyme española” -a cargo de Fundetec y en colaboración con RIM, Red.es y EOI Escuela de Negocios-, afirma disponer de soluciones móviles para acceder a Internet y al correo electrónico. Por ejemplo, un 50% dispone de conectividad Wi-Fi y un 80% emplea el móvil para el negocio. Y es que “la tecnología supone un reto estratégico para todas las empresas”, señaló Luis Díaz, director de EOI Escuela de Negocios, durante la presentación de informe.

El teléfono celular se considera como una herramienta básica para la actividad empresarial, por la inmediatez de la comunicación, la posibilidad de localización en cualquier lugar y momento y la posibilidad de incorporar nuevas herramientas, aplicaciones y sistemas que ayudan a la gestión del negocio. Dadas estas múltiples opciones, cabe destacar el uso de terminales avanzados con cuatro de cada 10 empresas como usuarias de dispositivos tipo PDA o BlackBerry.

La principal aplicación a la que se accede en movilidad es el correo electrónico, si bien también se emplea para acceder a Internet: el 23,3% de las empresas con más de 10 empleados dispone de este tipo de conexión. Otra aplicación cada vez más valorada es la mensajería instantánea. En cuanto a los dispositivos de acceso, es similar el uso de teléfono móvil o tarjeta PCMCIA para tal fin.

Con todo, aún existen ciertas barreras que frenan la entrada de tecnologías móviles en el tejido empresarial español, particularmente entre las microempresas. Estos frenos son el coste de los dispositivos y de los servicios de movilidad asociados; la complejidad en su utilización; o la interoperabilidad entre los dispositivos, los operadores y lo servicios. De forma particular, las grandes organizaciones se preocupan por el tratamiento y transmisión de la información mediante equipos móviles, y los autónomos y microempresas a menudo desconocen las tecnologías o no son conscientes de su utilidad.

No obstante, para Sebastián Muriel, director general de Red.es, “es la tecnología la que se tiene que adaptar a las necesidades de cada empresa, por lo que debería haber una segmentación tecnológica ya que las pequeñas organizaciones no se pueden dedicar a soluciones estándares”. Para fomentar el uso de la tecnología móvil en el entramado empresarial, entidades como el Ayuntamiento de Madrid se están dedicando a visitar a las empresas para asesorarles en esta materia. Hasta ahora, lo ha hecho en 20.000 comercios, si bien esperan alcanzar la cifra de 100.000 empresas para 2011.

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